La fibra cerámica es un material refractario ligero compuesto principalmente por óxidos de aluminio (Al₂O₃) y sílice (SiO₂), obtenidos a partir de la fusión de estos compuestos a altas temperaturas y su posterior transformación en fibras. Su estructura altamente porosa le confiere baja conductividad térmica, alta resistencia al choque térmico y excelente capacidad de aislamiento, lo que la hace ideal para aplicaciones en entornos de altas temperaturas. Se comercializa en diversas presentaciones, como mantas, módulos, paneles, papeles, cuerdas y masas moldeables, adaptándose a distintas necesidades industriales.
Debido a sus propiedades térmicas y mecánicas, la fibra cerámica se emplea ampliamente en el aislamiento de hornos, calderas, tuberías, compuertas y chimeneas, así como en revestimientos secundarios de equipos que operan en temperaturas extremas. Su flexibilidad, facilidad de instalación y resistencia a la corrosión química la convierten en una alternativa eficiente frente a otros materiales refractarios, optimizando el consumo energético y prolongando la vida útil de los sistemas térmicos.
La fibra cerámica se presenta en distintos formatos, como mantas, módulos, paneles y papeles, adaptándose a diversas necesidades industriales. Su alta resistencia térmica y flexibilidad la hacen ideal para aislamiento en equipos de alta temperatura.
Nos comprometemos a ofrecer la mejor solución según los requerimientos del cliente, asegurando un rendimiento óptimo y una instalación eficiente.
